El pastel de bodas es el complemento perfecto para coronar ese día tan importante.
Constituye una parte tradicional ya que simboliza la primera comida que se comparte entre los nuevos cónyuges. Además, es un símbolo de toda dulzura que los novios compartirán en su nueva vida.
El pastel también es muy importante en la decoración que se realice el día de la boda, y debería combinar con la ambientación del lugar y, además, con el traje de la novia. deben ser realizadas con un estilo particular para el diseño y, prácticamente, son piezas únicas. Afortunadamente, en Venezuela contamos con verdaderas artistas de este oficio; maestras de la creatividad lo cual es un elemento importante a la hora de elaborarlas. Por ello las novias locales gozan de una diversidad de opciones para escoger sus propios estilos.
Las hay elaboradas en pisos o satélites, como tortas separadas, con flores naturales o de azúcar, pasa cintas o cualquier otro diseño al gusto de los novios.
Se estila que la masa tradicional sea negra, con frutas secas y licor, pero aquí las preferidas son las de masa blanca y un toque de naranja, chocolate o almendras para lograr aprobación, principalmente entre las personas jóvenes. La cubierta se realiza con una capa de fondant o pastillaje, decorada de acuerdo a cada estilo.
Los pasteles de boda muestran el toque personal y transmiten toda la emoción y sensibilidad de ese gran acontecimiento, dándole ese toque de dulzura a la velada...
Aquí les muestro algunas de mis tortas de matrimonio.